Cada 1° de mayo es distinto a todos los anteriores y no hay forma de no sorprenderse una y otra vez cuando se acerca la hora de la convocatoria en el lugar señalado. Hoy fue nuevamente la Avenida del Libertador, ese espacio ancho, enorme, con una vista privilegiada del Palacio Legislativo que se puede observar a la distancia, erguido de manera mejestuosa, como símbolo de la democracia.
Hoy que se celebran 40 años de recuperación y de ejercicio ininterrumpido de la democracia, el movimiento sindical uruguayo se congregó y ocupó unas cuantas cuadras de la Avenida del Libertador, con sus banderas y consignas, reclamos y propuestas, canciones y abrazos.
Fue un 1° de mayo rico, intenso, profundo, en un contexto complejo del país, después de cinco años de la aplicación de la política del modelo de la desigualdad.
Hubo propuestas, críticas, cuestionamientos, datos, cifras, diagnósticos, análisis y definiciones categóricas. El PIT-CNT colocó algunos ejes centrales de su plataforma y los desarrolló ante la atenta escucha presente del presidente de la República, la vicepresidenta de la Nación, ministros, jerarcas de organismos del Estado, parlamentarios del gobierno y de la oposición.
Fue todo un ejercicio de la democracia a la que las y los trabajadores defendieron con su vida, y así lo harán cada vez que sea necesario.
Se reclamó por memoria, verdad y justicia. Como cada año. Porque es una causa que abraza el pueblo uruguayo todo, porque todos somos Familiares.
Este 1° de mayo, el movimiento sindical reclamó al gobierno que declare la emergencia nacional para derrotar la pobreza de las infancias y las adolescencias.
Hoy se habló fuerte, con respeto y educación, con fundamentos, datos e información.
Hoy habló Lorena Luján pero hablaron miles de mujeres. Trabajadoras domésticas, rurales, enfermeras y auxiliares de hospitales, cocineras y mozas, desocupadas y cuidadoras, amas de casa y maestras, ingenieras y actrices, cantantes y bailarinas, cajeras de supermercados y más y más mujeres de todas partes del territorio.
Hoy habló Enrique Méndez desde su tierra, Santa Rosa. Pero también hablaron con él los miles y miles de trabajadores de la industria láctea que están dando pelea en Colonia, en Cerro Largo, y los metalúrgicos despedidos de Yazaki de Las Piedras y el departamento de Colonia, y los de Paycueros de Paysandú, y tantos miles que sufren los coletazos del modelo de la desigualdad y confían en que de una buena vez, el nuevo gobierno aplicará políticas en defensa de la industria nacional y de los sectores más vulnerables y no a favor de los malla oro. El PIT-CNT explicó por qué vamos hacia una estrategia nacional de desarrollo para las grandes mayorías.
Hoy habló Sergio Sommaruga, con su amor por la educación y sensibilidad por las infancias y adolescencias. Pero con él ahí estuvieron en el estrado miles de docentes que fueron perseguidos por ejercer su vocación docente, y pertenecer a sus sindicatos. Allí estuvieron con él hoy miles de voces anónimas que en silencio construyen la democracia desde los barrios y pueblos de todo el país.
Hoy habló el PIT-CNT y la democracia respira robusta, intensa, enérgica, potente, profunda.