Los trabajadores de Abitab, que se encuentran en conflicto desde hace tres semanas, realizaron este jueves una movilización frente a las oficinas centrales de la empresa, ubicadas en Daniel Fernández Crespo y Lima, en reclamo de respuestas y de la instalación de un ámbito de negociación colectiva.
El conflicto se desató a raíz del desconocimiento del sindicato por parte de la empresa y la ausencia de negociación colectiva. En ese marco, este jueves los trabajadores realizaron un paro de una hora y una concentración frente a las oficinas centrales.
En diálogo con el Portal del PIT-CNT, Natalia Casariego, presidenta de la representativa sindical de Abitab, explicó que en noviembre de 2024 presentaron a la empresa una plataforma de seis puntos, con planteos concretos. “Algunos son de tenor económico, otros no. En principio nos dijeron que lo iban a evaluar, que lo hablarían con el Directorio, pero nunca obtuvimos respuesta. No nos daban bipartitas, hasta que tuvimos que recurrir al Ministerio de Trabajo”.
Casariego señaló que el Ministerio instó a las partes a mantener una nueva bipartita para avanzar en la negociación. “Accedimos y volvimos a pedir la bipartita, pero en esa instancia la empresa nos dijo que no estaba en condiciones de negociar, no por un tema económico, sino político e ideológico. En realidad, no reconocen al sindicato y no quieren firmar nada con nosotros”, aseguró.
La dirigente gremial explicó que los planteos sindicales son “totalmente razonables” y no implican un costo significativo para la empresa. “Reconocieron que los puntos son accesibles, porque algunos refieren a mejoras en los tickets de alimentación; no estamos tocando nada salarial directamente. También pedimos concursos internos y una bonificación por la licencia de conducir para quienes deben manejar en su tarea diaria. Son planteos muy accesibles, que no le mueven la aguja a la empresa. Por eso afirmamos que el problema es ideológico y político, no nos reconocen como sindicato y no quieren firmar nada con nosotros. De ahí surge este conflicto, que ya lleva tres semanas”, explicó.
Casariego destacó además el respaldo recibido de la Asociación de Empleados Bancarios del Uruguay (AEBU). “El apoyo de toda la estructura de AEBU es impresionante”.
Los seis puntos presentados por los trabajadores
Los planteos que el sindicato considera positivos para los funcionarios y sin perjuicio para la empresa son: “un subsidio para la renovación de la libreta de conducir para los trabajadores cuya tarea requiere utilizar vehículos de la empresa o alquilados por ella y aumento de las horas de trámite anuales de 8 a 16, con la posibilidad de usar más de 2 horas diarias”. En cuanto al presentismo proponen un “fraccionamiento en trimestres y sumar un día adicional para quienes no registren faltas en el año”. Solicitan también “capacitaciones anuales” con criterios de asignación de cupos equitativos para todas las áreas y realizar un concurso interno ante cada vacante y que los tres primeros lugares del concurso tengan una vigencia de seis meses. Reclaman una partida de alimentación a incluir en las jornadas de hasta cuatro horas y aumentar en 20% el valor del ticket.
Casariego subrayó que los reclamos se formulan en un contexto de ganancias récord para la empresa. “Compramos los balances y realizamos un estudio con la Comisión Asesora de AEBU y la empresa tiene ganancias históricas. Abitab se sostiene gracias a los trabajadores. Los que pagamos la UTE, OSE o ANTEL somos todos trabajadores. Se hacen ricos con nosotros, y no quieren darnos 200 pesos de aumento en el ticket. Nuestros pedidos son totalmente razonables”, afirmó.
Asimismo, recordó que en la última ronda de Consejos de Salarios quedó pendiente la recuperación de un 1% de salario real. “Ese 1% nos dijeron que no podían pagarlo de una vez. Y nos lo están pagando en cuatro cuotas de 0,25% mensual, porque la empresa alegó que no podía. En definitiva, los trabajadores estamos financiando nuestra propia recuperación salarial”.
La representante sindical insistió en que el sindicato seguirá apelando al diálogo y los espacios de negociación colectiva. “Estamos dispuestos a negociar, siempre apostamos al diálogo. No somos intransigentes”, remarcó.
Un camino difícil
El sindicato de trabajadores de Abitab se formó en 2018, pero el proceso no fue sencillo. “Fue un camino muy difícil. No nos daban reuniones, había un desconocimiento total. Sentimos muchísimo miedo cuando nos afiliamos. Después fuimos allanando el terreno, pero las reuniones eran unilaterales, íbamos a escuchar. Todo lo que pudieran ocultarnos, lo hacían. En la empresa hay mucho miedo, y juegan con la necesidad, porque todos trabajamos por la plata”, expresó.
Tras no lograr avances en el Ministerio, el sindicato resolvió cerrar formalmente la instancia bipartita y continuar con movilizaciones. “Volvimos al Ministerio con la empresa para cerrar esa instancia, por una cuestión de orden y seriedad, antes de establecer el conflicto. Dijimos en el Ministerio que íbamos a explorar otros caminos. De momento estamos movilizados, pero nuestra intención es negociar, tender puentes. Queremos una mesa de negociación real, donde podamos firmar algo”, afirmó Casariego.
El pasado 16 de octubre, día en que se realizó una asamblea de accionistas, los trabajadores también llevaron adelante una movilización. “Porque esto quedaba puertas adentro del Directorio, que no quiere negociar, y en realidad es una empresa que tiene accionistas. Nos hicimos conocer, entregamos los seis puntos que estamos reclamando, y ahora esperamos que la empresa nos convoque a negociar. Si no, seguiremos otros rumbos”, adelantó.
Desconocimiento del sindicato
Por su parte, el secretario general de la Asociación de Empleados Bancarios del Uruguay (AEBU), Martín Ford, explicó que los trabajadores de Abitab ya habían tenido dificultades en la negociación salarial. “Al principio hubo algunas complicaciones cuando se discutió la pauta salarial en los Consejos de Salarios. La empresa estaba un poco reticente a cumplir con lo acordado, pero finalmente se cumplió”, señaló. Posteriormente, se instaló una mesa bipartita para abordar otros temas que no podían tratarse en el ámbito de los Consejos de Salarios. “Se presentó una propuesta, hubo idas y vueltas, pero lo que hicieron fue vaciar de contenido la negociación. Lo que nos preocupa es que dan reuniones, dicen que tienen disposición de negociar, pero a todo responden que no. No plantean alternativas”.
Ford también cuestionó la actitud de la empresa frente a la organización sindical. “Se presentan como gente abierta al diálogo pero en realidad lo que hacen es no reconocer del todo al sindicato”.
El dirigente explicó que se mantuvieron varias instancias bipartitas y tripartitas en el Ministerio de Trabajo, pero sin resultados. “Se agotaron todas las instancias posibles. A todo decían que no. Incluso el propio Ministerio reconoció que no tenía mucho más por hacer. Por eso se resolvió salir del ámbito ministerial y llevar adelante este conflicto con paros sorpresivos y movilizaciones frente a la sede central de Abitab”, detalló.
Ford agregó que, en el marco del paro general parcial del PIT-CNT del próximo 29 de octubre, los trabajadores de Abitab aprovecharán la concentración prevista cerca de la casa matriz de la empresa, en Daniel Fernández Crespo y Lima, para visibilizar el conflicto.
“Se trata de que la empresa habilite una mesa de diálogo para destrabar la situación, porque la plataforma presentada por los trabajadores está lejos de ser una locura. Además, la empresa tiene ganancias récord. Nosotros denunciamos que su negocio se sostiene básicamente gracias a los trabajadores y a la mayoría del pueblo, porque su actividad central es el cobro de facturas y la función de corresponsal bancario. Su mercado son los trabajadores, y sin embargo no respetan la negociación colectiva ni a sus propios empleados”, subrayó.
Cambio de horario
Consultado sobre el reciente cambio de horario de la atención al público resuelto por la Asociación de Bancos Privados del Uruguay, Ford afirmó que se trata de una decisión empresarial unilateral. “No es que tengamos una opinión contraria en sí al cambio, pero tenemos la certeza de que esto modifica la vida de muchos trabajadores. Cambian el horario de un día para el otro y te complican la vida. Por eso vamos a defender cada situación para que ningún trabajador sea perjudicado”, expresó.
El dirigente sindical aclaró además que la medida no fue negociada con AEBU. “Ellos dicen que fue comunicada al sindicato, pero en realidad fue una decisión unilateral. En todos los bancos lo que hicieron fue avisar, no negociar. Si se va a cambiar el horario a un turno central, de diez a dos de la tarde, como plantean, debemos discutir una partida de alimentación, porque coincide con el horario del almuerzo. Pero ellos no quieren que eso les genere ningún costo. No es una negociación, es una imposición”, remarcó.
Según Ford, los bancos privados justifican el cambio de horario en la mejora de la atención al cliente, argumento que AEBU considera falaz.
“Hace años venimos denunciando que la atención a los clientes es cada vez peor porque hay menos personal y menos agencias. En algunas ciudades del interior se cerraron todas las sucursales. Además, los trabajadores reciben la orden de derivar todas las consultas hacia los canales digitales o los call centers. Y muchos de esos call centers están radicados en el exterior, lo que implica una extranjerización del trabajo. Desde Costa Rica, por ejemplo, no entienden la idiosincrasia uruguaya ni pueden dar respuestas personalizadas. A veces son chatbots los que responden. Entonces, si quieren hablar de atención al cliente, estamos dispuestos, pero no creemos que se resuelva cambiando el horario de atención”, señaló.
El dirigente también advirtió que este cambio no fue coordinado con la banca pública, lo que genera desajustes en el sistema. “No nos convocaron para analizar el tema. Atacan el problema por el lado equivocado. Denunciamos la falta de personal y la digitalización excesiva en un contexto de aumento de ciberdelitos y ciberestafas. Los bancos sacan publicidad para cubrirse, pero no se hacen responsables. Al mismo tiempo venden la solución, porque ofrecen seguros. Generan el problema y después venden la salida. Sabemos que en el capitalismo eso funciona, pero la gente reclama más y mejor atención, y eso no se logra cambiando el horario”, puntualizó Ford.