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Aporte a la memoria
Organizaciones de DDHH divulgarán audiovisual sobre 50 años del Plan Cóndor
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plan condor

Este miércoles 9 de julio, a las 18 horas, en el marco de los 50 años de la firma del acta fundacional del Plan Cóndor por parte de las dictaduras del Cono Sur, diversas organizaciones sociales y de derechos humanos -entre ellas el PIT-CNT- presentarán un audiovisual elaborado por “plancondor.org”. El objetivo es rescatar la memoria de esta fecha, para que las organizaciones sociales se apropien de la consigna y multipliquen iniciativas que contribuyan al reconocimiento y la reflexión sobre el Plan Cóndor.

El 28 de noviembre de 1975, representantes de los regímenes de Argentina, Bolivia, Chile, Paraguay y Uruguay se reunieron en Santiago de Chile y establecieron el llamado “Plan Cóndor”, una coordinación represiva entre los gobiernos dictatoriales de la época, que se extendió hasta la década de 1980. El Plan Cóndor reprodujo la misma gama de violaciones a los derechos humanos que las dictaduras cometían dentro de sus propias fronteras, pero fortaleciendo acciones clandestinas transnacionales para perpetrar estos crímenes.

En ese marco, el programador y desarrollador web Rodrigo Barbano explicó al Portal del PIT-CNT que este miércoles diversas organizaciones sociales y de derechos humanos, entre ellas el PIT-CNT, emitirán en forma simultánea una pieza audiovisual sobre los 50 años del Plan Cóndor. Se trata de un breve corto de un minuto y medio para rescatar la memoria de esa fecha. “Dentro de lo que hacemos en plancondor.org  tratamos no solo de recuperar información, sino también de presentarla de forma innovadora, usando redes y espacios donde la gente está. No se trata solo de enviar un PDF y que cada uno genere su opinión, sino de crear herramientas de difusión, es decir, informes, audiovisuales, infografías, líneas de tiempo interactivas, entre otras. En este sentido, buscamos diferentes formatos para que la información llegue a distintos públicos”.

Barbano agregó que, en ciertas ocasiones, se publican cortos o videos breves sobre la web y sobre lo que fue el Plan Cóndor siempre pensando en la tarea de rescatar la memoria. “Este año, considerando que se cumplen 50 años del acta fundacional y de la coordinación represiva, estamos impulsando varias iniciativas. Una de ellas es la digitalización de archivos del Ministerio de Relaciones Exteriores”, acotó. 

Junto a los colectivos sitiosdememoria.uy y plancondor.org, el Ministerio puso a disposición de la ciudadanía diez documentos históricos pertenecientes al archivo de Cancillería. 

Cabe destacar que ambos colectivos mantienen sitios web de archivo y difusión sobre la dictadura uruguaya y el Plan Cóndor.

“Estamos digitalizando varias decenas de documentos que permanecían en el archivo histórico diplomático del Ministerio, que muestran el rol, mucho más que administrativo, de Cancillería durante la dictadura y el Plan Cóndor. También estamos poniendo a disposición capítulos de libros que antes no estaban disponibles en Internet sobre esta temática y generando piezas audiovisuales para difundir la existencia del Plan Cóndor, su aniversario y esta colección de materiales”.

Barbano señaló que esta pieza audiovisual es parte de un esfuerzo por visibilizar el aniversario y aclarar conceptos que a veces se confunden.“¿Qué fue el Plan Cóndor?, ¿fueron todas las dictaduras?, ¿cuántas víctimas hubo de la coordinación represiva? También buscamos visibilizar el rol de Estados Unidos en el impulso de estos procesos dictatoriales y generar versiones digitales de materiales que antes no estaban en la red. Es una pieza más en este rompecabezas de múltiples esfuerzos, todo enmarcado en el 50 aniversario del Plan Cóndor”, dijo.

Por otro lado, Barbano explicó que, en lo personal, desde hace muchos años mantiene una fuerte inquietud y militancia vinculadas al acceso digital a la información y a los bienes culturales. “Las vicisitudes de la vida me llevaron a trabajar en distintos proyectos y, hace unos cinco años, junto a Mariana Risso desarrollamos el proyecto sitiosdememoria.uy, que es una iniciativa de investigación, recopilación y digitalización sobre la dictadura uruguaya y los años autoritarios previos, desde 1968 hasta 1985”, detalló.

“En sitiosdememoria.uy lo que hacemos es recopilar información y georreferenciar espacios represivos, ubicamos cárceles clandestinas, centros de detención, prisiones políticas, y además digitalizamos materiales de prensa, documentación proveniente de archivos militares y de inteligencia, y causas judiciales. Es un proyecto de recopilación y centralización de información dispersa sobre la dictadura, la represión, pero también sobre la resistencia y la denuncia”, dijo el experto informático. “Trabajamos junto a organizaciones sociales y políticas para recuperar, digitalizar y poner a disposición sus archivos y documentos. La finalidad de sitiosdememoria.uy es reunir información dispersa, centralizarla y hacerla accesible. Porque el fenómeno dictatorial es complejo, con múltiples aristas y una enorme cantidad de información generada, y tener un lugar de referencia donde encontrarla nos parecía fundamental”, subrayó.

Posteriormente, Francesca Lessa-investigadora y profesora de Estudios Latinoamericanos y Desarrollo en la Universidad de Oxford, en Reino Unido, y presidenta honoraria del Observatorio Luz Ibarburu- tomó contacto con el proyecto sitiosdememoria.uy y consideró que sería valioso aplicar la misma tecnología de digitalización, georreferenciación y conexión de contenidos para su investigación sobre el Plan Cóndor. La idea era trasladar la experiencia desarrollada en Uruguay a la recopilación de información vinculada al Plan Cóndor para sus estudios.

“Esa es también la génesis de plancondor.org, que surge con la voluntad de dar a conocer información que hasta entonces no estaba disponible, poner a disposición una base de datos de víctimas, causas judiciales asociadas al Plan Cóndor y, en una próxima etapa, de perpetradores y represores. Además, buscamos relevar lugares de detención y documentación vinculada a esa coordinación represiva”, explicó Barbano.

Aporte militante

Por otro lado, Barbano señaló que su aporte es una forma de militancia orientada a atender deudas pendientes de la sociedad. “Entiendo que siguen existiendo vulneraciones importantes a los derechos humanos y que hay deudas históricas muy relevantes. Por eso creo que mis humildes capacidades como programador y desarrollador pueden ser útiles para esta causa”, explicó.

“Si uno es bueno dibujando o pintando, quizás pinta muros; si es bueno escribiendo, tal vez se dedica al periodismo o a la investigación. Yo soy programador, y me parece fundamental que parte de la lucha contra las narrativas negacionistas y la impunidad pasa por visibilizar, recuperar y conectar información. Esa es la visión que tengo. Si fuera bueno en otra cosa, quizás haría otra cosa. Pero creo que sé programar, y desde ahí puedo aportar a combatir una injusticia histórica, a reivindicar la memoria, la verdad y la justicia. Y para eso se necesita la unión de muchas capacidades y distintas personas”, subrayó.

“Por eso iniciamos el proyecto sitiosdememoria.uy y seguimos adelante con plancondor.org. Mi forma de contribuir es poner mis conocimientos de programación, digitalización y desarrollo al servicio de esta causa. Esa es, en definitiva, la explicación de por qué estoy involucrado en esto”, expresó.

Barbano sostuvo además que esta tarea se enmarca en una disputa más amplia, que es por la narrativa y la hegemonía cultural e ideológica. “Entendemos que esta disputa es eterna, y que a medida que cambian las tecnologías y los espacios de encuentro entre las personas, también cambian los escenarios donde se da esa confrontación. Hoy, con las relaciones sociales y humanas cada vez más mediadas por la tecnología, se produce un fenómeno muy complejo, el ataque a la realidad misma. Se erosiona la posibilidad de tener una base común de hechos para poder debatir. Y creo que, desde el progresismo y la izquierda, existe todavía mucha dificultad para encarar este fenómeno, que es relativamente nuevo en términos de su masividad”, reflexionó.

En ese sentido, remarcó que “el aporte es poner información disponible. Eso, en sí mismo, termina siendo profundamente revolucionario, digitalizar diarios de los años 70, volantes clandestinos, resoluciones judiciales que a veces ni siquiera están accesibles. Todo eso se convierte en herramientas para que otras personas, además de nosotros, puedan dar esa disputa por la realidad y por la narrativa”.

“Pensamos que ese es nuestro aporte, no es todo el camino, pero sí son insumos para una batalla colectiva. Por ejemplo, puedo pasarte como periodista una nota de opinión publicada por Julio María Sanguinetti en 1973, donde afirma algo que hoy niega haber dicho. Bueno, eso está escrito, está publicado, no se puede debatir contra eso. El problema es que muchas veces no se tiene acceso a ese material y todo queda en una cuestión de opiniones, la tuya, la mía. Pero hay cosas que no son opinables. Dar ‘munición’ para esas discusiones es fundamental para dar esta batalla en los territorios digitales”, concluyó.