“Rechazamos y condenamos enfáticamente cualquier acto de violencia física o verbal”
Desde la Federación Rural se considera “hecho aislado” el caso del trabajador rural Hugo Leites quien denunció agresiones sufridas por reclamar por sus derechos laborales. Asimismo, se condena “enfáticamente” cualquier tipo de violencia y se explicó que abogan a diario por que la gente “disponga de las mejores condiciones para trabajar en el campo”. En una extensa charla con el Portal del PIT-CNT, el expresidente de la Federación Rural, Carlos María Uriarte, repasó el escenario actual para los trabajadores rurales y los cambios que se han producido con la llegada de la tecnología y las comunicaciones. Dijo que ahora todos los trabajadores están comunicados y que “ya no existe aquel Uruguay profundo” de otras épocas, en las que los peones estaban aislados del resto del mundo. No evitó cuestionar “lo que está mal” y aseguró que la Federación Rural confía absolutamente en las autoridades competentes que tienen en sus manos el caso del trabajador Hugo Leites de Salto.
“Lo primero que corresponde es el agradecimiento al Portal y al PIT-CNT por la posibilidad de señalar y explicar nuestra forma de analizar este caso puntual y la realidad en general. Valoramos mucho esta entrevista porque no es fácil para la Federación Rural acceder a estos ámbitos de comunicación directa y por ello es que lo valoramos mucho”.
En relación a la denuncia sobre lo sucedido en la Estancia Flor de Ceibo, Uriarte señaló que “a nuestro entender es un caso aislado y pensamos que de ninguna manera se puede generalizar, pero rechazamos y condenamos enfáticamente cualquier acto de violencia física o verbal”. En este sentido, para el expresidente de la Federación Rural existe violencia verbal cuando se emiten determinados juicios. “A veces la violencia verbal provoca hechos de violencia física y eso es lo que no compartimos con muchas de las personas que han opinado sobre este tema sin tener la certeza previa de los hechos”. Uriarte indicó que “desde la Federación Rural hemos averiguado los hechos y tenemos fuentes de información directa de (cómo sucedieron) los hechos y estamos a la espera que las autoridades competentes emitan su fallo”. Según explicó, se confía plenamente en las garantías tanto del Poder Judicial como del MTSS. “Confiamos plenamente en las autoridades competentes” sostuvo. En relación a la actuación inmediata del MTSS sobre el caso puntual y las condiciones de trabajo en el Establecimiento Flor de Ceibo, Uriarte señaló las irregularidades que detectó el cuerpo inspectivo. “Según las informaciones que nosotros tenemos, son temas comunes que pueden surgir de inspecciones a los predios rurales, es difícil que todos estemos totalmente en regla, siempre hay algo mejorable. En este caso se detectaron –a nuestro entender- irregularidades sobre un tractor, un caso, un cinturón de seguridad, también de un mosquitero en una vivienda, una puerta que no cerraba bien, y lo más grave es que no había agua potable. Ante todas estas cosas somos tan sensibles como cualquiera, queremos que la gente disponga de las mejores condiciones para trabajar en el campo”.
Sobre el Uruguay profundo
La Federación Rural le envió una carta al Presidente de la República, Tabaré Vázquez, donde cuestiona algunas afirmaciones del Secretario de DDHH de Presidencia, Nelson Villarreal Durán realizadas la pasada semana al Portal, y replicadas en tapa de La República en su edición del domingo. La Federación no comparte que sea algo frecuente o común el trabajo “servil” característicos de los regímenes feudales “porque es una manera indirecta de hablar de esclavitud en el sector rural del Uruguay profundo”. Uriarte sostuvo que “en el mundo de hoy no existe el Uruguay profundo, cualquier trabajador rural está conectado a través de las posibilidades de la comunicación que existen, está absolutamente informado de sus derechos”. Empero, reconoció que “puede haber” algunos pocos empresarios o trabajadores que no conozcan la legislación actual y los derechos vigentes, “pero ya no se puede hablar de gente que esté aislada y que no conozca el medio”. En este sentido, Uriarte agregó que “no conocemos si el Secretario de DDHH de Presidencia, Villarreal Durán dispone de (otra) información”. Dijo que “si hay esos esquemas, somos los primeros en querer saber y corregirlos, porque no compartimos esa forma de relacionamiento” con los trabajadores. “Lo rechazamos en forma absoluta y hasta lo que nosotros hemos podido constatar, el caso de notoriedad es un hecho de violencia entre trabajadores y queremos llegar hasta el fondo para saber qué fue lo que lo ocasionó”. Uriarte dijo que para la Federación Rural “hay cosas que no nos cierran y queremos compartir nuestras dudas, porque se habla que trabajaba catorce horas por día, y no sé cómo hace porque en estos días de invierno no se puede trabajar tanto porque las horas de luz no pasan las ocho horas”.
Sobre usos y abusos
El expresidente de la Federación Rural también dialogó sobre la existencia de relatos con menciones a sometimiento de la familia de los peones, que en ocasiones han referido incluso a abusos sexuales hacia esposas o hijas de trabajadores rurales, como parte de una tradición de dominación machista patriarcal. “Es imposible decir que no existe”, pero aclaró que en la eventualidad que se detecten casos de este tipo, sería algo similar a lo que sucede en otros ámbitos de la sociedad. “No se puede de ninguna manera –enfatizó- interpretar como una realidad actual ya que ahora sucede todo lo contrario”, refiriéndose al vínculo de respeto que se percibe en el día a día. “Yo estudié en Montevideo pero me crié afuera porque no teníamos medios para educarnos y pude convivir con ambos ámbitos. He sido arrendatario toda mi vida y he trabajado y me preparé para tratar de ser un buen profesional en algo que me gusta. Y realmente valoro mucho -pero mucho- las condiciones de vida y laborales que hay en el ámbito rural y me enferma ver cómo no siempre los uruguayos valoramos y aprovechamos el trabajo de campo. El uruguayo debería valorarlo y aprovecharlo mucho más porque el trabajo de campo es sacrificado pero tiene enormes recompensas; no sé si la gente se imagina lo que significa trabajar en medio de la naturaleza, al aire libre, todos los días comiendo sano y respirando aire puro, eso es invalorable. Hay muchos uruguayos que no tienen acceso a nada de eso, por tanto, me parece importante señalar que lo de las condiciones laborales de esclavitud de ninguna manera se pueden generalizar, todo lo contrario, nosotros deberíamos explotar esas condiciones laborales que son buenas, que personalmente las valoro mucho, cuidarlas y fortalecerlas. Nosotros, los uruguayos todos, deberíamos tratar que esa relación de confianza y apoyo de uno hacia el otro se multiplique”.
Cambio cultural
“En estos años lo que estamos viendo es un cambio profundo y si hubo casos cuestionables yo no los defiendo y estamos abocados a cambiar, personalmente los censuro y los castigo, yo defiendo otra posibilidad que el Uruguay tiene y debe explotar que es una relación laboral fraterna, solidaria, no de enemigos ni divisiones y que nos apoyemos entre todos, en un ambiente saludable”. Para el expresidente de la Federación Rural, las actuales condiciones son “muy vulnerables” para los productores. “Creo que hay una discriminación hacia el productor rural porque se lo ve con la imagen esa” de abuso y dominación. “Entre todos tenemos que cambiar eso porque no es real”.
Sobre las vínculos entre productores y trabajadores, Uriarte dijo al Portal que la realidad los ha llevado a sentirse "expuestos" y que la contratación de personal requiere la confianza. En cuanto al sector forestal, explicó que es una realidad en la que se lleva a los trabajadores en un vehículo a desempeñar su tarea y luego se los devuelve al centro poblado. “Eso ha provocado un despoblamiento de la campaña y por eso las escuelas rurales se quedan sin niños, cada vez vive menos gente en campaña, los niños hijos de trabajadores, que se crían en esos centros poblados, crecen como extraños, como forasteros en sus propios pagos, y muchos de ellos ni saben andar a caballo. Todo ello va contra un país que depende del agro y eso nos preocupa mucho. A nosotros nos gustaría que esa gente, en lugar de estar yendo y viniendo, viviera en el campo y fuera capaz de acceder a buenas condiciones de vida y acceder a la educación”. Uriarte remarcó que en su vida pelea por lograr esas condiciones de trabajo para la gente de campo; y como Federación “nos alarma los casos que se oponen a esta forma de vida, los casos que se oponen a una relación laboral fraterna y solidaria, ello realmente nos preocupa muchísimo, tanto como le preocupa al PIT-CNT” concluyó.