SINTEP: Paro de 24 horas en enseñanza privada este jueves 9 de noviembre por salario y pago de antigüedad
El Sindicato Nacional de Trabajadoras y Trabajadores de la Enseñanza Privada (SINTEP) convoca a un paro nacional de 24 horas para el próximo jueves 9 de noviembre, con el propósito de exigir un aumento del salario real, el pago de la antigüedad para la enseñanza no formal y la negociación de un convenio colectivo que incluya diversas conquistas. Además, a las 9 de la mañana se llevará a cabo una asamblea en el Platense Patín Club, ubicado en Juan Paullier 1557.
El paro de la enseñanza privada en su totalidad es por aumento del salario real, pago de la antigüedad para la enseñanza no formal y la negociación de un convenio colectivo que incluya diversas conquistas.
A las 9 horas, el sindicato realizará una asamblea en el Platense Patín Club para discutir una extensa plataforma reivindicativa.
El dirigente de SINTEP, Christian Quintero, expresó al Portal del PIT-CNT que durante la asamblea se debatirá el tema del pago de la antigüedad para la enseñanza no formal. Subrayó que este subgrupo es el único dentro del sector que no recibe tales beneficios y que se trata de una reivindicación histórica del sindicato. En 2018, las patronales reconocieron el pago de la antigüedad, en 2022 el sindicato logró que se estableciera una mesa de negociación, mientras que en 2023, SINTEP presentó un informe a través del cual se demuestra la viabilidad del pago.
“Por lo tanto, entendemos que estamos cerca de lograr obtener este beneficio, ya que no existen excusas respecto a su inviabilidad, sino que lo que falta es voluntad política, y se ha avanzado en las negociaciones”, afirmó Quintero.
Otro de los planteamientos que el gremio de la enseñanza privada analizará se relaciona con los Consejos de Salarios. El objetivo de SINTEP es lograr un convenio colectivo que incluya conquistas. “Estamos buscando conquistas para la enseñanza privada. Por supuesto, estamos exigiendo un aumento salarial. En los dos últimos Consejos de Salarios, aunque logramos modificar las directrices del gobierno al evitar que se descontara la caída del PBI del 4% y proteger nuestros salarios de los aumentos de la inflación, en la actual negociación tenemos un objetivo claro de incrementar los salarios, considerando que no lo hemos logrado en varias rondas”, expresó.
Quintero agregó que en la presente ronda salarial, la patronal también ha presentado su plataforma. “Se han sentido empoderados por la situación general que el gobierno ha planteado contra los trabajadores, especialmente en lo que se refiere a la eliminación de la retroactividad, la intención de otorgar personería jurídica a los sindicatos y la supresión de algunos derechos laborales. En este contexto, las patronales han visto la oportunidad de crear una plataforma que ataque los derechos y las conquistas ya obtenidas, como por ejemplo, la propuesta de reducir significativamente el pago de la antigüedad para los trabajadores que comiencen a utilizar ese beneficio, la instauración de guardias gremiales y la restricción de la participación de delegados sindicales en los centros de trabajo”.
Quintero mencionó que también se han logrado avances significativos que serán sometidos a consideración en la asamblea, tales como una plataforma de beneficios adicionales al salario, que incluye la ampliación de los días disponibles para cuidados o controles médicos, así como la creación de un fondo social destinado a los trabajadores de la enseñanza privada y sus familiares, para poder recibir atención en salud mental.
“Esperamos que este paro genere un impacto político significativo que nos permita desafiar las directrices del gobierno y las de las patronales, y que demuestre a todos los que formamos parte de este sindicato que, a través de la lucha, la organización y la confianza en lo que hacemos, podemos lograr conquistas para todos”, expresó Quintero. Desde 2018 hasta la fecha, SINTEP ha aumentado de 2.000 a casi 8.000 la cantidad de afiliados.
Informe del Secretariado Ejecutivo a los núcleos de SINTEP
Acerca del estado actual de la negociación en la décima ronda de Consejos de Salarios y convocatoria a paro general de 24 horas para el jueves 9 de noviembre.
El siguiente informe tiene como objeto dar cuenta de la situación actual del proceso de negociación colectiva de la décima ronda de Consejos de Salarios y se complementa con el informe sobre el pago de la antigüedad que enviamos a todos los núcleos de base con fecha 19 de octubre.
En la composición de este nuevo documento se veló por aportar información ordenada, clara y relevante, para que sirva como insumo preparatorio de la asamblea general.
Las secciones consecutivas del informe tratan sobre los siguientes temas; a saber:
- Un marco introductorio sobre la coyuntura social y la política económica. El análisis procura servir de contexto valorativo de las pautas del poder ejecutivo para la décima ronda de Consejos de Salarios.
- Un breve análisis del proceso realizado por SINTEP en las dos rondas anteriores inmediatas. Se trata de un repaso mínimo de los resultados de la octava y novena rondas de negociación colectiva, que sirven como preámbulo analítico del proceso en curso.
- Sobre la plataforma programática y reivindicativa de SINTEP a esta ronda de Consejo de Salarios, aprobada por unanimidad en la Mesa Representativa del 3 de agosto.
- Coyuntura y caracterización de las pautas del gobierno
Como se ha informado oportunamente, las pautas que el Poder Ejecutivo estableció para esta nueva instancia de negociación colectiva se caracterizan por su insuficiencia y sus efectos socialmente regresivos. En tal sentido, son la continuidad de una política cuyos rasgos principales en relación con el mundo del trabajo, son el rezago salarial y la precarización laboral.
- Según el informe del Instituto Cuesta Duarte de agosto del corriente año, el conjunto de las trabajadoras/es del país padece un rezago salarial promedio del 2%, respecto al poder de compra de sus salarios en 2019.
La pérdida de ingresos que la política económica del gobierno le impuso a cientos de miles de familias, a lo largo de estos tres años, no tiene vuelta atrás, más allá de una equiparación tardía que aún resta concretar.
Asimismo, y empeorando el cuadro general de rezago, el gobierno incumple con su promesa de terminar su periodo quinquenal asegurando el mismo poder adquisitivo que se tenía antes de que asumiera funciones.
Esta decisión afecta particularmente a un conjunto de trabajadoras/es que forman parte de los sectores salarialmente más postergados en las dos rondas anteriores.
Por esta razón, entre 55.000 y 60.000 trabajadoras/es terminarán los 5 años de este período de gobierno, con una marcada caída de sus ingresos salariales respecto al nivel pre-pandemia.
- Las pautas del gobierno tampoco proponen solución alguna para recuperar los salarios sumergidos. Esta situación es extremadamente preocupante tomando en cuenta que en 2022 se registraron unos 549.000 ocupados con ingresos inferiores a $25.000 líquidos al mes por 40 horas semanales de trabajo, casi 100.000 más respecto a los 452.000 de 2019.
En estas circunstancias de postergación salarial se encuentran principalmente los trabajadores menores de 25 años, las mujeres y los asalariados del interior del país.
Los salarios sumergidos afectan con mayor intensidad a las trabajadoras/es del sector privado y a quienes no cotizan a la seguridad social. Tendencialmente, los sectores de actividad más afectados por los salarios sumergidos (rurales, comercio, restaurantes y hoteles) son los mismos que, por las propias pautas gubernamentales, no alcanzarán la equiparación del salario real de 2019.
- Otra situación que las pautas para la décima ronda obvian por completo, es el déficit laboral que afecta a cientos de miles de personas.
En el último año más de 300.000 personas tuvieron problemas de empleo, ya sea porque no tuvieron oportunidades de inserción laboral, porque se desalentaron ante la búsqueda infructuosa de empleo y abandonaron la búsqueda o porque quieren trabajar más horas de las que efectivamente hacen y no encuentran posibilidades para ello.
A su vez, entre el 20 y el 22% de la fuerza laboral del país se encuentra sin protección social, desempeñándose en la informalidad laboral.
El desempleo juvenil trepa al 25%, siendo el más alto medido por franjas de edades.
- Vale señalar que mientras se produce este aumento significativo de personas con salarios sumergidos, la tasa de desempleo promedio viene mostrando un comportamiento pertinaz desde fines de 2021.
Según la evidencia estadística, en el segundo trimestre de 2023 la tasa de desocupación promedio se ubicó en 8,57%, algo superior al primer semestre de este año y medio punto más alto que el desempleo observado en igual período de 2022. El desempleo declarado corresponde a casi 160.000 personas, unas 27.000 más respecto a un año atrás.
En suma, a la tendencia creciente a los salarios sumergidos se le añade la tendencia creciente al desempleo.
- Esta coyuntura desarma el mantra liberal que propugna la desvalorización salarial como factor que descomprime la generación de empleo. Las circunstancias concretas del país demuestran que la retracción salarial no trajo como consecuencia el abatimiento del desempleo estructural. Por el contrario, la consecuencia más visible del rezago salarial es el empobrecimiento de las familias trabajadoras, la persistencia del déficit laboral y la profundización de la desigualdad social.
- A esto se le suma un paquete de reformas y recorte de presupuesto que implican expropiación de derechos y transferencia de recursos que se quitan del bolsillo de las y los trabajadores en beneficio del 1% más rico, afectando el acceso y la calidad de usufructo de derechos fundamentales como la salud, la educación y la vivienda. Vale recordar al respecto que, solo en ANEP, el recorte de presupuesto trasciende los 170 millones de dólares.
- Al finalizar el ciclo de las dos primeras rondas de Consejos de Salarios (octava en 2020 y novena en 2021), la economía creció un 3,5% y la pérdida acumulada de salario real trepó al 3,7%.
Durante el consignado período, la clase trabajadora perdió algo más del 1% de participación en la riqueza (41,5% del PIB en 2019 a 40,3% en 2022), en tanto la captura del capital ascendió de 37,8% a 39,3%.
Claramente el país creció económicamente, pero la clase trabajadora se empobreció en términos generales.
En los primeros dos años del gobierno se transfirieron 1.000 millones de dólares del trabajo al capital, empobreciendo a la sociedad, aumentando la violencia social y el desamparo.
- El corolario de este modelo de la desigualdad se materializó institucionalmente a principios de mayo de 2023, con la aprobación de la reforma jubilatoria. Reforma que se hizo sin tomar en cuenta ninguna de las objeciones y propuestas del movimiento sindical.
Durante todo el trámite parlamentario de la ley 20.130, el PIT-CNT encabezó una serie de acciones para impugnar socialmente los efectos más nocivos de esta reforma regresiva.
Entre noviembre de 2022 y marzo de 2023 se llevaron adelante dos paros parciales con movilizaciones masivas, que desembocaron en el gran paro general del 25 de abril, donde un compañero de nuestro sindicato, por primera vez en toda la historia de SINTEP, tuvo el honor de hablar en representación de todo el PIT-CNT.
- A estas acciones de protesta y lucha, se añadieron otras acciones organizadas como la recorrida nacional, las actividades barriales y la instalación de la carpa de la resistencia en la plaza “Mártires de Chicago” durante el mes de marzo. Esta carpa funcionó como un espacio para la organización de talleres formativos y acciones de difusión pública en general, en el que nuestro sindicato también hizo un aporte constante.
En simultáneo con este curso de acciones se continuaron implementando asistencias a las comisiones parlamentarias y manteniendo reuniones con bancadas y con legisladores.
- La obstinación del gobierno no hizo lugar a ninguna de las preocupaciones y cuestionamientos del movimiento sindical.
Así, las únicas aspiraciones que objetivamente fueron contempladas son las de las minorías privilegiadas, que, entre otras prebendas, lograron mantener todas las exoneraciones de pago al BPS, cuyo monto total trasvasa los 200 millones de dólares (una tercera parte del llamado déficit de la seguridad social).
- De la larga lista de cambios perjudiciales que impuso ésta última reforma, vale mencionar específicamente tres tipos de confiscaciones que se aplicaron contra la clase trabajadora; a saber:
1) La confiscación de tiempo de jubilación por la vía del aumento del tiempo de trabajo obligatorio para poder jubilarse, llevando a los 65 años la edad de retiro. Esta confiscación se refuerza con la extensión por 5 años más del 15% del aporte de los trabajadores al sistema, a cambio de un salario jubilatorio (tasa de adquisición) que se reduce un 10% respecto al régimen anterior. Por tanto, se trabaja más, se aporta más y se cobra menos.
2) La confiscación de derechos para el acceso y usufructo de las pensiones por viudez y discapacidad, reduciendo el monto de estas últimas en un 20% respecto al monto que se pagaba antes de la reforma.
3) La confiscación del derecho a la libertad de elegir de las personas, obligando a todas las trabajadoras/es a destinar una tercera parte de sus ahorros jubilatorios a las AFAP. Un sistema privatizado, ineficiente, caro e inseguro.
La reforma jubilatoria no resuelve con justicia ni solidaridad ninguno de los problemas profundos del régimen previsional.
- En ese marco, y en arreglo a las definiciones que sobre el tema seguridad social tiene el PIT-CNT desde el VIII Congreso (2003) en adelante, la Mesa Representativa Nacional Ampliada (MRNA) del 7 de setiembre definió iniciar la campaña de recolección de firmas para habilitar, junto al resto del movimiento social, el instituto de democracia directa instituido en el artículo 331 de la Constitución. El fin de la enmienda constitucional es consagrar la seguridad social como un derecho humano fundamental y establecer tres grandes premisas desde las que ir hacia una nueva ley integral de la seguridad social en Uruguay; a saber:
1) La restitución de los 60 años como edad mínima no obligatoria para acceder a la jubilación.
2) El aumento del 20% de las jubilaciones y pensiones más bajas, como resultado de la equiparación de la mínima prestación jubilatoria con el monto del salario mínimo nacional.
3) La supresión del lucro y la especulación financiera de los ahorros jubilatorios de las personas. La eliminación de las AFAPS redundará en un fortalecimiento de la institucionalidad público-estatal que ofrece el BPS, dando todas las garantías a las personas sobre sus aportes previsionales.
- En suma, el modelo de la desigualdad ha venido avanzando con la respectiva generación de estragos sociales que están a la vista de todas y todos.
La tarea para la clase trabajadora es poner su inteligencia, sus fuerzas morales y sus brazos solidarios a enfrentar este modelo, sembrar conciencia de clase y luchar por los cambios estructurales que reclama el nacimiento de una sociedad nueva, humanista, justa y digna.
En esa perspectiva, el momento en curso nos reclama unidad, organización y lucha para avanzar, fuertes y juntas/os, en la lucha por el salario y los derechos laborales que llevamos adelante en esta nueva ronda de Consejo de Salarios, así como para dinamizar con todas nuestras fuerzas la campaña de recolección de firmas, para concretar el plebiscito hacia una nueva seguridad social.
- El proceso de SINTEP en la negociación colectiva
- A pesar del contexto adverso en el que nos encontramos, vale recordar que en las últimas rondas de negociación nuestro sindicato logró quebrar las pautas propuestas por el Poder Ejecutivo, obteniendo una línea de conquistas favorables para las y los trabajadores.
La 8ª ronda de Consejos de Salarios fue la primera de este gobierno. Las pautas que se establecieron para el denominado período puente, julio 2020-junio 2021 fueron las siguientes: Al inicio del período no se otorgaba ajuste de salario, ajuste igual a 0 (cero) y había que esperar a enero del 2021 para que se aplicará un 3%.
- Al finalizar el año del acuerdo, en junio del 2021 se verificaría la inflación, a ese porcentaje se le iba a detraer la caída del PBI y se otorgaría la diferencia. En términos concretos: a la inflación que estaría en el orden del 9% -finalmente lo superaría- se le quitaba la caída del PBI 4,2% y el 3% otorgado en enero. El ajuste sería entonces en el entorno del 1,8%, perdiendo de esta manera más del 4% de la capacidad de compra de nuestros salarios.
- A mediados del 2021 se inició la 9ª ronda. Nuevamente las pautas propuestas por el Poder Ejecutivo eran insuficientes. Tenían en cuenta en algunos casos, no para todos los sectores de actividad, una recuperación de parte de la pérdida que se había producido en el año anterior.
- En el caso de SINTEP, debido a que rechazamos la propuesta, la recuperación ya se había conquistado en la 8ª ronda.
- El resultado de los acuerdos logrados demuestra que en la enseñanza privada, a diferencia del 75% de las y los trabajadores asalariados, no sufrimos pérdida de salario real, es decir, no perdimos capacidad de compra con nuestros salarios. Esto significó, para ser más precisos, que durante los 3 años que van de julio de 2020 a junio de 2023, se ajustaron los salarios por IMS -subgrupo 07- en este caso se acordó también una cláusula que protegía el salario de la diferencia que surgiera entre la inflación y el índice medio de salarios. En el resto de los subgrupos el ajuste fue por IPC, aplicando también ajustes y correctivos semestrales, además de la recuperación del 4,2% de la caída acaecida en 2020.
- En ese escenario, de alta complejidad tuvimos la determinación para plantear que no se iba a firmar un acuerdo que tuviera como consecuencia la rebaja salarial. Recordemos que las instancias de negociación de la 8ª y la 9ª ronda que iniciaron en julio de 2020 estuvieron marcadas por el primer y el segundo momento de la emergencia sanitaria producto de la pandemia y esto generaba condiciones para que las cámaras empresariales apelaran al fundamento de un escenario de crisis e incertidumbre en el sector.
- Es importante destacar que aún en ese contexto, también logramos conquistar el Protocolo para la detección, prevención y abordaje del acoso sexual en centros de enseñanza privada.
- La 10ª ronda de negociación colectiva
- Luego de un proceso participativo y democrático, generado por la discusión y elaboración de propuestas en los núcleos de base, en la comisión de mujeres de SINTEP y en el Secretariado Ejecutivo, llegamos a una síntesis que convertimos en plataforma y que fuera aprobada por unanimidad en nuestra Mesa Representativa del pasado 3 de agosto.
- En nuestras reivindicaciones salariales planteamos: aumento de salario real que acompañe el crecimiento de la economía.
Ajustes salariales cada seis meses por IPC o IMS según corresponda.
Correctivos semestrales que protejan el salario de la evolución de la inflación en períodos más cortos que los que plantean las pautas (un año).
El cumplimiento del pago de la prima por antigüedad para las y los trabajadores de la enseñanza no formal para terminar con la injusticia y la discriminación salarial que sufren nuestras compañeras y compañeros por más de 30 años.
-En otro orden, nuestras reivindicaciones extra salariales se centran en la protección de la salud y la mejora de las condiciones laborales y de vida de las y los trabajadores de la enseñanza privada y sus familias. Por estos motivos propusimos: la creación de un fondo social para garantizar el acceso a la salud mental, la ampliación del objeto de la licencia para cuidados de familiares y una licencia especial para exámenes médicos preventivos (colposcopia, próstata).
También propusimos mejorar la protección para las víctimas de violencia. Se busca incrementar el tiempo necesario para realizar distintas diligencias cuando se está en una circunstancia de este tipo. Esto se sumaría a lo ya conquistado en 2018.
En materia de derechos sobre esta problemática, en el ámbito privado la licencia para víctimas de violencia que logró SINTEP se encuentra entre las que tienen las mejores condiciones.
Otra de las reivindicaciones es la posibilidad de tener un día cada dos años para mudanza sin afectación salarial o de otro tipo. Asimismo, proponemos la eliminación de los contratos a término, una herramienta que es utilizada como forma de precarización laboral. En la séptima ronda (2018) se avanzó en forma importante limitando su alcance, pero aun así entendemos que cualquier mecanismo que genere inestabilidad y desmejoramiento de las condiciones de trabajo debe erradicarse.
SINTEP plantea la reducción y delimitación de la jornada laboral. En nuestro sector se realizan tareas o actividades a las que convocan las instituciones por fuera de nuestro horario habitual de trabajo. Como consecuencia, destinamos buena parte de nuestro tiempo fuera del horario por el que somos contratadas/os. Es necesario establecer el carácter voluntario de la realización de tareas que no forman parte de las obligaciones inherentes al cargo que se desempeña y límites claros para que el tiempo extraordinario de trabajo sea remunerado en acuerdo a lo que establece la normativa laboral.
- Para ampliar la información, sugerimos ver documento “Décima Ronda de Consejos de Salarios y Plataforma Salarial” enviado a los núcleos como insumo para la discusión de la plataforma en el pasado mes de julio.
- Al momento de confeccionar este informe, la dinámica de las negociaciones no nos permite dar elementos cerrados a cabalidad. Incluso, en los días previos al paro del 9 de noviembre hay una nueva reunión del consejo de salarios que puede producir novedades respecto a algunos temas muy importantes de la plataforma.
Hasta el momento hemos ido avanzando en algunos de los puntos que integran nuestras reivindicaciones, en otros estamos a mitad de camino y en un tercer subconjunto de los temas, estamos muy lejos de concretarlos.
El proceso está lejos de cerrarse y la efectividad y contundencia del paro es fundamental para respaldar las negociaciones que viene encabezando el Secretariado Ejecutivo.
En ocasión de la asamblea general se procederá a pasar un informe detallado del estado de la negociación, con las últimas novedades incluidas.
- El inicio de las negociaciones presentó una novedad. Las cámaras patronales también establecieron su plataforma.
- El contexto de deterioro democrático que generó el gobierno en relación con la negociación colectiva y los derechos laborales, propició un nuevo escenario. La modificación de la Ley 18.566 de negociación colectiva y particularmente la supresión de la llamada “ultractividad” (derechos adquiridos), la limitación del derecho de huelga amparada en artículos de la Ley de Urgente Consideración y la desregulación derivada de la modificación del decreto 291/007 relacionado a la seguridad y la salud en el trabajo, son algunos ejemplos claros de lo que estamos haciendo referencia.
- En este marco, las patronales remitieron un conjunto de demandas que recogen aspiraciones que atacan la columna vertebral de los derechos de las y los trabajadores.
En gran medida, la orientación de los contenidos formulados va directo a mejorar su rentabilidad a costa de rebajar las condiciones laborales y salariales de las y los trabajadores.
-Asimismo, es de destacar que la efectividad creciente de las medidas de lucha de SINTEP lleva a las patronales a pretender limitar el derecho de huelga con la instalación de “guardias gremiales”, la prohibición de los paros sorpresivos y la obligación del preaviso.
- Por último, se pretende legislar sobre temas que ya están definidos en las normas existentes en relación con los períodos de licencia y recesos.
- Con respecto a esta plataforma, la representación de SINTEP, sin desmedro de la consideración positiva hacia la capacidad legislativa que le cabe a los Consejos de Salarios en el ámbito sectorial, ha manifestado tres comentarios; a saber:
- Que la naturaleza de los Consejos de Salarios es para tratar con preeminencia los planteos de las y los trabajadores en materia de derechos laborales.
- Que no se abrirá opinión al respecto hasta tanto no haya avances en las aspiraciones de las y los trabajadores.
- Que la asamblea general de SINTEP es la que resolverá sobre todos y cada uno de los elementos de la décima ronda de Consejos de Salarios.
A modo de síntesis
- La coyuntura económica y política en la que está inserta la 10ª ronda de Consejos de Salarios está marcada por un avance del capital sobre el trabajo, sostenida e implementada por el gobierno de las minorías privilegiadas.
- Bajo estas coordenadas los sectores empresariales han potenciado sus condiciones para optimizar su rentabilidad con la precarización de las condiciones laborales y salariales, arremetiendo contra los derechos de las y los trabajadores.
- Las consecuencias sociales de este modelo ha provocado estragos en las condiciones de la convivencia colectiva en la sociedad; con aumento del empobrecimiento de las familias trabajadoras, recrudecimiento de las lógicas de violencia social, deterioro democrático y la persistencia de lógicas de exclusión que consolidan el clivaje típico del capitalismo entre derechos y privilegios.
- En ese marco de retrocesos estructurales también se desarrollan luchas organizadas del pueblo para defender sus derechos y levantar una perspectiva contrapuesta.
En ese dinamismo de acumulación de luchas se inserta el proceso de crecimiento y organización que el sindicato viene desarrollando en los últimos años.
- Una de las características más importante para resaltar en ese nivel de valoraciones, refiere al ostensible crecimiento que ha tenido el sindicato en cantidad de núcleos de base y de masa de afiliaciones en los últimos años.
En términos porcentuales, desde que asumió la actual dirección del sindicato por primera vez en mayo del 2017 hasta el momento actual, se registra un aumento del 70% en el padrón de afiliaciones activas, en tanto la cantidad de núcleos organizados en la base sindical tuvo un incremento de un 48%.
- Este proceso de doble expansión (afiliaciones activas y núcleos de base) ha sido un objetivo político por el que se ha trabajado sistemáticamente y fue clave para la configuración de la base material que propició el salto cualitativo de SINTEP en materia de conquistas sindicales, incluso frente a las condiciones adversas vinculadas a la política impulsada por este gobierno.
- Haber construido un sindicato fuerte y unido es la explicación de todo lo logrado en estos años y es la condición esencial para seguir avanzando en la conquista de derechos para todas y todos.
La asamblea general que estamos convocando en este acto, tiene que ser un nuevo jalón en ese proceso que colectivamente venimos desarrollando.
- La lucha por el pago de la prima por antigüedad en toda la enseñanza privada y la negociación de la décima ronda que está en curso, son un desafío y una oportunidad para conquistar avances que beneficien a todas las trabajadoras y trabajadores.
Asimismo, es necesario seguir junto a nuestro PIT-CNT desarrollando la tarea de recolección de firmas y de concientización social, que hagan posible el plebiscito para consagrar la seguridad social como derecho humano fundamental en la constitución, bajo el principio de la solidaridad, la justicia social y la erradicación del lucro.
Para estas grandes tareas es imprescindible reforzar la necesidad de la unidad de acción de SINTEP y continuar con el fortalecimiento democrático que venimos transitando.
Compañeras y compañeros: Considerando el desarrollo del proceso de negociación colectiva y en cumplimiento de lo resuelto por la Mesa Representativa de SINTEP, el Secretariado Ejecutivo convoca a: paro nacional de 24 horas de toda la enseñanza privada el día 9 de noviembre y asamblea general a las 9:00 horas en el Platense Patín Club.
Orden del día:
1- Balance y perspectiva del proceso de lucha por el pago de la antigüedad en la enseñanza no formal.
2- Balance y perspectiva del proceso de negociación en la 10ª ronda de Consejos de Salarios.
Basta de excusas, llegó la hora de las y los trabajadores. Hasta que la dignidad se haga costumbre secretariado ejecutivo SINTEP CSEU PIT-CNT.