Las presas que cantaban para sobrevivir

Jueves, 07 Abril 2022 18:38
Valora este artículo
(6 votos)

Ellas cantaban. Porque sobrevivir al encierro era la consigna y para ello había que cantar. Las jóvenes cantaban y asombraban al barrio, que veían esa cárcel de mujeres como un lugar tenebroso, en el que pasaban cosas extrañas. Mujeres presas políticas que cantaban. Después pasaron otras cosas vinculadas a dos fugas que marcaron la vida de la cárcel de Cabildo.

En la década del 70, las presas políticas encerradas en aquella cárcel eran «cuidadas» por las hermanas de la Congregación de la Caridad del Buen Pastor.  Pero en cierta medida y tal vez de manera silenciosa, las vecinas y vecinos también se ocupaban de ellas y sus familias.

Pasaron muchas cosas desde el retorno a la democracia y el cierre de aquella cárcel de Cabildo. Hoy la edificación ubicada en el barrio Tres Cruces de Montevideo es un Sitio de Memoria, de acuerdo a lo establecido por la Ley 19.641, como uno de los espacios físicos donde se verificaron violaciones a los derechos humanos cometidos por el Estado, así como actos de resistencia y lucha por la construcción o recuperación democrática.

El pasado martes, un grupo de expresas políticas de la Cárcel de Cabildo participaron de un encuentro en la sede del Observatorio Luz Ibarburu para informar sobre el proyecto del Sitio de Memoria de Cabildo como referente cultural. Ese día, además se firmó el comodato que enmarca el proyecto.

“Las actividades que aspiramos a llevar adelante trascenderán el marco de la recuperación de la memoria colectiva del pasado reciente. Buscamos que no solamente se conozca y reconozca lo sucedido, sino también apoyar el potencial creativo de las nuevas generaciones, que interpretan desde el presente lo guardado por la memoria de la sociedad”.

Para ello, se conformó la Asociación de expresas de Cárcel de Cabildo, que nuclea a más de 40 mujeres.

“Nos proponemos continuar y profundizar las actividades dirigidas al entorno barrial como centros educativos, organizaciones sociales y sindicales”.

Precisamente, por estos días y previo al inicio del proyecto cultural en rescate y cuidado de la memoria, las expresas salieron a recorrer el barrio. A conversar con vecinas y vecinos. A contarles su historia y a escuchar otras voces de la historia de aquella cárcel enclavada en medio de un barrio que tuvo que tuvo que aprender a convivir con una realidad dolorosa.

“Esas charlas con la gente del barrio fueron sanadoras”, reconocieron al Portal algunas de las expresas políticas. “Nos encontramos con gente que ahora son padres o abuelos, y que por entonces eran niñas y niños que observaban la cárcel, veían a nuestras familias llegar a las visitas y hasta en algún caso recordaban habernos escuchado cantar”.

La directora del Observatorio Luz Ibarburu y responsable de la Secretaría de DDHH del PIT-CNT, Fernanda Aguirre, comprometió el máximo apoyo sindical para el proceso de reforma y acondicionamiento del vetusto espacio a los efectos de concretar el nuevo enclave cultural de la memoria.

“Hablaremos con los sindicatos para ver de qué forma podemos comprometernos a dar una mano en este proceso tan desafiante y muy importante para la memoria”.

Aguirre valoró en diálogo con el Portal que las nuevas generaciones puedan conocer lo que allí se vivió en tiempos represivos. Asimismo, dijo que en el actual escenario político que vive el país, de resurgimiento de expresiones fascistas y la “lamentable reivindicación por parte de algunos actores de lo actuado por los criminales de lesa humanidad”, resulta imprescindible apuntalar la memoria.

“Creo que la iniciativa de estas compañeras expresas es un hecho de resistencia, de su época cuando el terrorismo de Estado pero también ahora en este contexto de resurgimiento de expresiones fascistas. Lo que ellas padecieron como lo que vivieron tantas y tantos compatriotas fue en el marco de la coordinación internacional del Plan Cóndor. Y la construcción de la memoria nos tiene que ayudar a frenar el discurso de los dos demonios y el relato falso y mentiroso sobre lo que vivimos en aquellos años de nuestra historia. Acá no hubo dos demonios, hubo un pueblo que fue masacrado por las prácticas del terrorismo de Estado. Por eso creo que la reconstrucción de su historia, su memoria, la memoria del barrio, así como también la colaboración que aportará el movimiento sindical, todo se direcciona en la construcción de un camino. El año pasado tuvimos 29 procesados por crímenes de lesa humanidad y en 2020 fueron 13. Este año vamos 3 pero tenemos 60 pendientes. No se trata de pobres viejitos sino de criminales de lesa humanidad que cometieron los peores y más aberrantes crímenes que no caducan, ni prescriben. Por tanto, lo que están haciendo las compañeras y mucha gente más es transitar un camino de memoria, verdad y justicia”, sentenció.

Ex Cárcel de Cabildo

Modificado por última vez en Jueves, 07 Abril 2022 20:07
Inicia sesión para enviar comentarios