José Olivera (FeNaPES): “El Poder Ejecutivo dilata y arrincona los procesos de negociación” en la educación
La semana próxima los trabajadores de la educación paralizarán sus actividades durante 48 horas en el marco de un conflicto que se podría profundizar ante la falta de respuestas del gobierno. El próximo martes 5 los trabajadores de la educación media nucleados en FeNaPES, Ades y Afutu, realizarán un paro general de 24 horas con movilización a partir de las 10 de la mañana frente a
José Olivera, secretario general de
Sobre las propuestas de negociación colectiva y en base a la ley 18.508, desde los sindicatos se entiende que el Poder Ejecutivo “está obligado a entregar los proyectos de Rendición de Cuentas y balance de ejecución presupuestal en los ámbitos de negociación colectiva y por eso reclamamos que se convocara y se presentara este documento al Consejo Superior de Negociación Colectiva y no se adoptara este lógica de elegir con quién hablar y generar espacios ad hoc por fuera del marco legal”. Olivera aseguró que sobre esta base que plantea el Ejecutivo, “recién el 4 se estaría produciendo esa reunión con el PIT-CNT y el 6 de junio se estaría volviendo a reunir el ámbito de negociación colectiva, cuando el 30 de junio hay que presentar la propuesta en el Parlamento. O sea, el Poder Ejecutivo dilata y arrincona los procesos de negociación con poco margen de maniobra en términos de tiempo, porque al 30 de junio hay que estar entregando el proyecto de Rendición de Cuentas en el Parlamento”.
Esquizofrénia del gobierno
Sobre este punto, el secretario general de
Los trabajadores denuncian que la situación vista en perspectiva es aún más grave. “Lo que es peor es que vamos a pasar todo un quinquenio frente a un gobierno nacional que no se sentó jamás a discutir con los trabajadores y sin que el gobierno nacional se haya dignado a convocar a los sindicatos de la educación para tener un intercambio en forma directa”.
Heridas abiertas
En relación al relacionamiento de los sindicatos de la enseñanza y el gobierno, Olviera reconoció que el decreto de esencialidad que impulsó el Ejecutivo marcó la cancha y dejó una herida. “Eso marca la subjetividad, no solamente quedó abierta (la herida), sino que fue una clara situación de aislamiento del propio gobierno, porque si uno tiene que resumir lo que ha pasado en los últimos años, el hecho de que el Parlamento le diera la espalda al Ejecutivo, que la propia fuerza política le diera la espalda, que la gente en la calle le diera la espalda al Ejecutivo, demuestra el grave error que cometió el gobierno nacional a la hora del decreto de esencialidad. Es decir, no negocio, no demuestro buena fe y todavía agravo más la situación tomando medidas de este tipo. Por lo tanto, esto tenía que haber sido corregido. No se corrigió el año pasado, no se está corrigiendo sustantivamente más allá de algunas declaraciones de buenas intensiones, pero una cosa son las declaraciones y otra son los hechos. Y los hechos hablan por si solos” enfatizó.
Datos del presente
Todos estos elementos son los que han llevado a la actual coyuntura que tendrá como eje central de la movilización de los trabajadores, la paralización de 48 horas de martes y miércoles de la próxima semana.
“Hoy, al 30 de junio, no tenemos una negociación colectiva real para un sector que tiene 60 mil trabajadores y que paga casi 100 mil salarios al mes, como es el caso de